Entre finales de 2023 y abril de 2025 el Banco de la Rep??blica redujo su tasa de inter??s de referencia en 400 puntos b??sicos, pasando de un m??ximo del siglo de 13,25% a 9,25%, atendiendo a una econom??a con un crecimiento limitado y una inflaci??n que ced??a.
De la mano de este descenso, las tasas de inter??s de la cartera tambi??n se ajustaron, con reducciones m??s que proporcionales frente a lo hecho por el banco central. En su punto de mayor ajuste, los intereses del cr??dito hipotecario, comercial y de consumo, descendieron hasta 500, 600 y 725 puntos b??sicos, respectivamente.
Aunque los niveles de tasa de inter??s de la cartera a??n distan de los m??nimos hist??ricos, lo que si ha sucedido es que los spreads de riesgo, medidos como la diferencia de estas tasas frente a la referencia del Banco de la Rep??blica, si est??n en sus m??nimos o muy cerca de estos.
Lo anterior parece contraintuitivo en momentos en que la incertidumbre de la pol??tica econ??mica, medida por Fedesarrollo, se mantiene elevad??sima. Sin embargo, se explica por una fuerte competencia en el sistema financiero y la anticipaci??n a una reducci??n de la tasa de inter??s del Emisor que no se materializ??.
Cabe recordar que a inicios de 2025, el consenso preve??a una reducci??n de la tasa de inter??s del banco central hacia niveles por debajo de 8,00%, cuando hoy es casi un hecho que la tasa se mantendr?? en 9,25% en lo que queda del a??o.
Esto demuestra que las tasas de inter??s de la cartera han descendido de forma importante, incluso m??s all?? de lo hecho por el banco central. Sin embargo, existe un limitante para descensos adicionales; la compleja situaci??n fiscal.
En este punto hay que recordar que la tasa de inter??s de referencia del Banco de la Rep??blica se fija para operaciones de liquidez a un d??a con garant??a de t??tulos. Es decir, aunque influye sobre las tasas de inter??s de la econom??a, lo hace sobre todo en aquellas de muy corto plazo.
Para tasas de inter??s de mayor plazo, es la curva de t??tulos de deuda p??blica la que termina definiendo los niveles de referencia. Un buen ejemplo es la tasa de un cr??dito hipotecario, que bien podr??a ser a 10 a??os y debe incorporar el riesgo vigente en el pa??s durante dicho plazo. En este caso, el t??tulo de deuda p??blica (TES) a 10 a??os ser?? el punto de partida para la definici??n de dicha tasa hipotecaria.
Con lo anterior en mente, y retomando el per??odo de reducci??n de tasas antes mencionado, la tasa de inter??s de un TES a 10 a??os ha aumentado 200 puntos b??sicos, cerrando el espacio para menores tasas de inter??s del cr??dito a plazo. Sobra recordar que el aumento del costo de financiamiento del Gobierno es causado por el deterioro de las finanzas p??blicas.
En definitiva, las entidades financieras han transmitido m??s que proporcionalmente lo hecho por el Banco de la Rep??blica en materia de tasas de inter??s, comprimiendo los spreads de cr??dito hasta niveles m??nimos, pero encontrando un limitante por el lado de las altas tasas de la deuda p??blica, que al ser referencia para los cr??ditos de mayor plazo, cierran el espacio para descensos adicionales.
CAMILO P??REZ ??LVAREZ
Investigaciones Econ??micas y An??lisis de Mercados Banco de Bogot??.